Como si no fuera plenamente evidente su estado alterado INCONTROLABLE en el momento de la trágica masacre, ahora los medios y la sociedad entera se abocan, como siempre en estos casos, con grotesca desesperación a la búsqueda de evidencias para exponer, para demostrar CLARAMENTE que el chico estaba desquiciado, que era evidentemente anormal, que estaba loco... QUE NO ERA COMO NOSOTROS...
Sin embargo, lo indudablemente cierto es que Cho Seung-Hui caminaba normalmente por las calles, que había adquirido la nacionalidad estadounidense cumpliendo con los engorrosos y tardados trámites, que cursaba normalmente UNA CARRERA UNIVERSITARIA (lo cual es un privilegio de muy, muy pocos en este planeta), que compró dos armas cumpliendo todos los requisitos legales...
Las "pruebas" hasta ahora encontradas simplemente son risibles. Cuántos jóvenes inician y truncan y reinician y terminan por claudicar a terapias psicológicas por mil y un motivos... cuántos han tenido que acudir a juzgados por conductas reprobables, no una sino varias veces... cuántos manifiestan sus inconformidades, su rebeldía, sus rencores a sus circunstantes de toda manera posible (textos, imágen personal, discusiones, videos, golpes)...
Lo indudablemente cierto es que Cho Seung-Hui era PERFECTAMENTE NORMAL... con todo lo que esto significa...
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